ida y vuelta

La puerta hecha añicos deja entre ver hacia adentro de la habitación, y de la misma, se oyen unos lamentos en la pesadez de la oscuridad, el primero en ingresar en la habitación es Eivien, quien logra ver varias siluetas de personas tiradas en el piso, amagadas de las manos y en algunos casos tapados de los ojos, los cuerpos yacen inmóviles y sin vida, con las ropas hechas jirones, y otras desnudas con sus cuerpos despedazados o mordidos hasta el hueso, los lamentos son suaves e inundan la habitación, Jeryco entra la habitación mientras Eivien mira que uno de los cuerpos es don Artemion; Jerico en el momento observa que se están acercando un centenar de zombis, el ambiente es pesado, la oscuridad y todas las muertes ocurridas en el lugar van absorbiendo la energía de los viajeros, la falta de luz, es como la esperanza, casi nula, los aventureros, logran reaccionar y eivien toma a don Arty, el cual todavía vive pero es cuestión de horas, para que sea un ghoul o un zombie o algo peor!, Albán manda energía arcana atacando a el grupo de zombis, Eivien le da el cuerpo pesado de don arty a Jerico, al otro lado del pasillo un wraith ataca a Eila y Barragán, el cual entre los dos lo mata, otro wrait sale de entre las paredes y ataca a Albán, Eivien y Jeryco, quienes después de varias heridas ligeras salen victoriosos del pasillo, abajo se oyen los centenares de zombis que suben poco a poco, junto con otras creaturas de la noche, suben y suben estrepitosamente hasta la entrada de la mina, donde la luz de la luna es opacada por las nubes, y los aventureros son recibidos por un aire otoñal muy frio, ellos tienen que seguir hacia la Ciudad de Bizarag.

Llegan a la ciudad de Bizarag y llegan a la Catedral de la Santa Trinidad, donde don Arty es curado, y los viajeros se proponen a pasar una noche tranquila, a excepción de Eila que se dispone a trabajar en la ciudad a altas horas de la noche, ( pero no sean mal pensados!, la Srita. Eila es una picara, bueno es una ladrona debe de trabajar). Eila en el transcurso se ha dado cuenta que Don Albán le cuesta ver con poca luz, así que se dispone a conseguirle unos, así que ella se dirige hacia una de las zonas comerciales más interesantes de la ciudad de Bizarag, ella se escabulle a la mitad de la noche a la tienda de un viejo alquimista, casi a la vista de los pocos guardias de la ciudad, elude y abre la puerta, localiza su objetivo, que se ubica en el taller debajo de la recamara, que es un tapanco y el ronquido del viejo alquimista le da tranquilidad a la Srita picara, y después de un rato de buscar encuentra su cometido, un par de anteojos en un armazón bastante agradable y ligeramente pesado, pero bien ornamentado, así que Eila procede a retirarse, pero un tablón flojo del piso le hace una jugarreta, y en el tapanco se oye la voz de un viejito, y Eila se esconde entre un taburete y un costal con cosas viejas un gato es el único testigo, de la presencia de la dama, el Viejito en su sexto sueño, solo nombra al gato para que se calme, así que el alquimista sube de nuevo y la picara deja pasar un rato, y Eila sale sigilosamente, y llega a la casa de Albán.

Jeryco mientras tanto llego a la Herrería y coloco todo su armamento en su lugar así como sus armas, él se encontraba cansado y en el umbral del negocio, Barragán esperaba pacientemente junto con Eivien, así que se dispusieron a ir a la taberna donde Silidar el Druida los esperaba, o al menos eso creen, Jeryco se despide de ellos y procede a descansar porque en unas horas le espera una larga jornada de trabajo.

Albán llega a su casa, y empieza a llenar una tina con agua tibia para tomar un merecido baño, cuando la termina de llenar, Eila llega agitada, y cortésmente le cede el lugar, Eila deja su maleta en la parte de arriba y Albán utiliza sus artes para entretenerse, Albán después de un gran rato, se da cuenta que Eila queda dormida en la tina.

La noche paso tranquila y todos se levantaron a medio día, a excepción de Jeryco quien para ese entonces ya lleva un cuarto de jornada laboral; Albán el mago se levanta, y solo una pesada luz de medio día se observa entre sus ventanas de madera, la pulcritud con la que ordena su cuarto es sorprendente, y una sensación de bienestar y salubridad emerge tan solo de mirar tan dedicada acomodamiento, así que tranquilamente baja del tapanco y comienza a abrir la puerta para sentir el aire “matutino” cuando en la esquina observa un símbolo que ya había visto, es el símbolo del fénix boca abajo y cuando lo mira un aire de azufre huele por todas partes, siente como si toda la felicidad de su vida se fuera en un momento quedando los días de agonía y miseria, siente la tristeza de toda la humanidad al mismo tiempo, tiempos de desolación y perdición le esperan, solo al ver el símbolo, Albán corre llorando y desesperado.

Albán después de un rato muy espaciado ya más tranquilo, va a la herrería donde trabaja Jeryco, lo saluda, ya que se encuentra en la entrada ahormando una espada, el calor que sale del negocio, Albán ve que en una viga se observa escrito con letras muy muy viejas “Happi Blacksmiterh te”, entre el dueño del Herrero Feliz Jerico y Albán, logran un acuerdo para un puerta nueva, que tiene que hacer Jerico, después de las transacciones Jeryco y Albán comienzan a hablar de lo sucedido en el acto los alcanza Barragán el semiorco bárbaro, y proponen regresar a la mina, para regresar por el tesoro, los tres quedan de acuerdo y ya que Jeryco sale antes de anochecer, proponen reunirse en la noche, en la entrada de la mina.

Jeryco al término de su jornada logra convencer a Arkidm de que lo acompañe en la aventura, Jeryco y Barragán, marchan hacia el norte, el camino de piedra blanca ya marchito por el tiempo, se observa varia gente que va y viene de los distintos áreas de trabajo alrededor de Bizarag, de entre la poca gente una silueta de un hombre pequeño, a quien van alcanzando, la silueta sale una voz diciendo:-” Hey jóvenes!!”- y el acto baja rápidamente una máscara y el símbolo del fénix de cabeza se visualiza cuando lo mira un aire de azufre huele por todas partes, siente como si toda la felicidad de su vida se fuera en un momento quedando los días de agonía y miseria, siente la tristeza de toda la humanidad al mismo tiempo, tiempos de desolación y perdición le esperan, Jerico cabalga rápidamente y Barragán corre para el lado contrario,

Los tres viajeros: el cocinero Barragán, el Herrero Jeryco y el Mago cascarrabias Alban, se encuentran de vuelta en la boca de la mina, proceden a bajar y mucha gente se encuentra al margen de la misma, donde un guerrero un poco loco, imbécil e imprudente saca de sus estribos a Alban después de varias preguntas del porqué de su estadía ahí, la poca gente mira curiosa hacia adentro de la iglesia, ya que se ha corrido la voz de que don Arty ha sido rescatado con vida de los adentros de la vieja mina. El dueño de “Happi Blacksmiterh te” se ve a lo lejos con su sequito.

Una señora se pone histérica y entra llorando hacia el interior de la mina, Jericó logra detenerla de un brazo pero se escabulle, un grito de terror se oye del interior, y la sangre y vísceras de la mujer adornan ya la pared, los aventureros bajan rápidamente el camino es conocido, llegan rápido, pasan el túnel por la puerta de madera bajan la escalera de caracol y la puerta de piedra se haya cerrada, Barragán y Jeryco la levantan en lo que el Mago Alban protege sus espaldas, entre la oscuridad emerge un demonio rojo que expide un olor muy fuerte a azufre cuando se mueve drásticamente, la lanza le pasa por un costado a Barragán y Jericó y Alban entran a la Habitación, Alban traza en el piso un círculo de protección arcano, Barragán pelea ferozmente con el demonio y el atraviesa la piel con su lanza dos veces hiriéndolo, Jericó ataca con su arco y logra herir al demonio, después de varios ataques Barragán está a punto de caer, y entre Jeryco Alban y Barragán han logrado redimir al demonio el cual en un casteo a la defensiva se esfuma de su vista.

Los aventureros logran abrir la trampa de la puerta del tesoro sin complicaciones ya que Alban sumoneó a unos pequeños demonios para ayudarles a activarlas, el cual era jalando los pedestales de las antorchas, la puerta se abre, y entre el umbral y el tesoro hay un hoyo de 3 metros de ancho que desciende como 10 metros con unos picos que alcanzan hasta los dos metros y medio, Jericó y Barragán logran captar el baúl que contiene monedas de plata, ambos se ponen de acuerdo y cuenta: “uno, dos y treesss….” Barragán llega al otro lado y jeryco intenta agarrarse pero la superficie es resbalosa, y cae entre los picos, pero es golpeado por uno en el costado y hunde sobre su pecho herido. Después de un rato sube, y entre todos llevan el baúl hasta la superficie. Victoriosos siente el aire fresco y el amanecer los recibe a lo lejos.

La ciudad de Bizarag los recibe a la luz de la mañana fría otoñal, las hojas se arremolinan en las esquinas de las calles y cada quien se dirige a su casa, cuando llega Alban a la suya lo que ve es espantoso.